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Abre las alas
Este transeúnte
Ante la brisa
De la Tempestad
La claustrofobia
Cautiva el rejunte
Que agobia rasgos
De mi soledad.
Carcome melancolia
De sangre caliente,
Caníbal pendiente
Que come de mí.
Desde esos rieles
Que siempre llevaron
Hasta los besos
Que nunca te di.
Ayer, tanta sed
No hubo quien alimente
Sino el supurar de la herida
De mi cicatriz
Hoy, charla de autistas
Erizan las pieles,
Remueven las pistas
De lo que viví.
Caucásica concentración del sol
Duerme profanado el paradigma
Y esteriliza el dolor del palido color
Que la revuelve a ella misma.
Peregrinación de corazones,
hacia intangibles puntos de partida,
Entre las tantas almas heridas,
pertenencias que no eran tan mias.
Ciega mirada penetrante
Esparciendo seducción
juega conmigo su histeria incesante.
Estoy tomando un café con un ido
Desayunando con sus dientes marfil
En plena fabrica textil
descociendo ojos cocidos.
Neurisma comprometedora,
La misma muda predicadora
vá copulando esterilidad.
Cambio tus besos por divinidad.
Portfolio de espíritus celestes
Acuéstate y déjalos, aunque cueste:
Si los serenos andan ganas de cavar
sus labios fúnebres lo llevaran.
Los aplausos de los locos
ya van calentando el ambiente. mientrás las mentes sin fines lucro
estimulan vestigios de la gente.
El relámpago me aclara la visión, el viento despeina los estructurados
Mientrás veo tan difusa la misíon
veo al sumiso hecho un inadaptado.
Traducida a todos los lenguajes
Su voz de conceptos imprecisos
Difuminan colores de razas entre el arco iris blanco y mestizo.
El cuadro ya no tiene imágenes,
las rocas sín erosión,
la naturaleza carece de un paisaje
Y la guitarra de una canción.
Asi en mi ruta de la felicidad
el asfalto se suplanta por sonrisas
para que cada momento sea el viento y en la muerte haya brisas.
